¿Cómo limpiamos un puerro?

     Su uso moderado es muy beneficioso para la reducción de la tensión arterial y el colesterol, así como para el buen funcionamiento del tránsito intestinal debido a la gran cantidad de fibra que presenta.

     Para utilizar este vegetal es necesario realizar una limpieza exhaustiva del mismo. De lo contrario puede que nos rechinen los dientes si quedan restos de tierra. Para ello nos haremos con un buen cuchillo y una tabla de cocina, para evitar cortar la encimera o superficie de la cocina. Al igual que la cebolla, este tiene muchas capas superpuestas. Las exteriores son de color blanco y las más interiores de color verde.

1.- Ponemos el puerro sobre la tabla y realizamos un corte en su parte superior eliminando así las hojas verdes que presenta. Dejaremos como mucho unos 2-4 cm de estas.

2.- Cortamos la parte inferior, las raíces que van unidas al suelo.

3.- Hacemos un corte longitudinal desde la mitad del puerro hacia su parte superior sin llegar a cortarlo por la mitad.

4.- Retiramos completamente las dos primeras capas que lo recubren.

5.- Separamos las capas en su parte superior y lavamos bajo el agua del grifo para quitarle restos de tierra, polvo o cualquier otro tipo de impurezas. Y ya lo tenemos listo para utilizarlo cómo y dónde queramos.