
Cangrejos de rio en salsa de tomate casera con un toque picante

INGREDIENTES: (para 4 personas)
- 2 Kg de cangrejos de río
- 2 cebollas
- 3 dientes de ajo
- 2 cayenas
- 800 g de salsa de tomate casera (o 2 botes de tomate natural triturado de los pequeños)
- Una copa de vino blanco
- Aceite de oliva
- Sal
ELABORACIÓN:
El cangrejo de río conocido como “cangrejo de río rojo” o “americano” es un crustáceo de agua dulce que suele encontrarse en ríos, riachuelos, arroyos o lagunas de corrientes de aguas no muy rápidas y limpias. La presencia de este animal en el agua suele ser un indicativo del buen estado en el que se encuentra esta.

Suelen hacer pequeñas excavaciones, sobre todo en la zona fangosa de las orillas o márgenes de la zona donde se encuentran, formando hoyos con el fin de esconderse y alimentarse también de materia orgánica. Suelen alimentarse de animales muertos, peces, insectos, renacuajos, etc. incluso de carroña. Pero que esto no os eche para atrás a la hora de comerlos porque están deliciosos.
La temporada de pesca del cangrejo de río suele ser en los meses de julio y agosto. Aún recuerdo cuando era pequeño ir con mis padres a pescar cangrejos a un río de la provincia de Guadalajara (España). Pasábamos la noche acampados al lado del río. Entonces, cuando se era mucho más responsable con nuestro entorno, se podía hacer acampada libre. Poníamos unos reteles en los márgenes del río con cebo para atraer al cangrejo y los supervisábamos pasado un tiempo para ver si habían picado.


Un retel consiste en un aro metálico que sostiene una red en su interior con forma de bolsa, en cuyo fondo se coloca el cebo para atraer a los cangrejos. Este se pilla con una especie de pinza para evitar que se suelte y caiga al agua al lanzar el retel. Cuando los cangrejos detectan el olor del cebo se introducen en esta especie de bolsa y quedan atrapados. Tanto para lanzar el retel al agua como para sacarlo, este dispone de una cuerda larga anudada al aro metálico para tirar de él con fuerza.
Para mantener vivos y de la manera más confortable posible los cangrejos, desde que los pescamos hasta que llegamos a casa, utilizaremos un instrumento denominado rejón.

Este es un elemento muy utilizado en la pesca en agua dulce. Debe ser lo suficientemente largo según lo que vayamos a pescar: truchas, cangrejos, salmón, etc. El que utilizaremos para la pesca de cangrejos no suele ser muy largo y es de material metálico para que, al meterlos, no rompan la malla, aunque suele ser muy tupida. Uno de sus extremos está cerrado fijamente, mientras que el otro se abre y cierra ejerciendo cierta presión para poder introducir los cangrejos.
Aunque podemos comprarlos en la pescadería, hoy en día se sigue practicando la pesca de cangrejos de la misma manera y aquí tenemos la prueba: un buen aperitivo o entrante de cangrejos de río en salsa de tomate casera con un toque de picante.
Aunque veamos que en la cacerola o en el plato hay mucha cantidad de cangrejos, a la hora de comerlos se quedan en nada.

Se chupa más que otra cosa para rebañar la carne que tienen, de ahí que se acompañen de una buena salsa que les de sabor y que podamos pringar con un buen pan. ¿Nos ponemos manos a la obra? Para 4 personas con 2 kilos aproximadamente de cangrejos de río está bien. Los cangrejos deben estar vivos y coleando antes de ser cocinados. Aquellos que se hayan muerto hace tiempo los desecharemos por precaución.
Debemos limpiarlos previamente a su elaboración y, para ello, les debemos sumergir en agua removiéndolos para eliminar posibles impurezas. Cuando el agua salga turbia, la escurrimos y volvemos a echar agua limpia para volverlos a limpiar. Esta acción la haremos hasta que el agua salga clara.
También debemos quitar el intestino donde se acumulan restos de comida y líquidos si no queremos que nos amarguen el plato. Esta acción es lo que conocemos vulgarmente como “caparlos”. Para ello sujetamos bien el cangrejo boca arriba, con cuidado de que no nos pellizque con las pinzas, y sujetamos la aleta central de la cola con los dedos índice y pulgar, girándola levemente y tirando hacia afuera. El intestino sale entero y fácilmente. El único problema es que hay que hacerlo con el animal vivo. Se cocinan inmediatamente después de hacer esto.
En una cacerola de gran tamaño ponemos un chorrito de aceite de oliva y pochamos 2 dientes de ajo y 2 cebollas picadas en trocitos pequeños. Añadimos también 2 cayenas para dar un toque picante. Una vez pochado añadimos unos 800 gramos de salsa de tomate casera. Si quieres saber cómo hacer esta salsa casera, pincha en la imagen.

800 gramos de salsa se corresponde aproximadamente con 2 botes de tomate natural triturado de tamaño pequeño, el cual podemos utilizar si no queremos o no tenemos los ingredientes necesarios para hacer la salsa de tomate casera. Añadimos una copa de vino blanco, salamos y dejamos que cueza unos minutos a fuego medio-bajo. Añadimos los cangrejos y removemos sin parar para que se empapen de la salsa de tomate durante 5 minutos aproximadamente, ni uno más, ni uno menos porque, de lo contrario, su carne endurece y se desprende con dificultad del caparazón.
¿Qué os parece? ¡Están deliciosos! Y preparaos para chuparos los dedos.




